Premios Goya 2011

Y por fin llegó uno de los actores más esperados a los premios Goya. Javier Bardem desfiló por la alfombra roja del Teatro Real rodeado de grandes medidas de seguridad. Se trataba de su primera visita a España tras haber sido padre y aunque no ha podido venir acompañado de su esposa, Penélope Cruz, lo ha hecho junto a su madre, Pilar Bardem, y su hermano, Carlos.

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Bardem ha sido parco en palabras en su desfile a la hora de hablar de su reciente paternidad: "Estamos muy felices y todo está yendo muy bien". En cuanto a la posibilidad de llevarse el Goya a casa, el actor manifestaba antes de la ceremonia: "Si el Bafta es muy difícil, el Goya lo es más".  Sin embargo, Javier Bardem se alzaba horas más tarde con su quinto Goya por su brillante interpretación en Biutiful. Pese a competir con actores como Antonio de la Torre por Balada triste de trompeta, Luis Tosar por También la lluvia, Ryan Reynolds por Buried (Enterrado), el marido de Penélope Cruz pudo llevarse la 'manita' a la que se refería a su llegada a los premios poco después de que un espontáneo irrumpiera en el escenario.

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El actor subió al escenario para agradecer el galardón a todas aquellas personas que apoyan su profesión: "Gracias, gracias, gracias por este reconocimiento, lo recibo como un abrazo del cariño y apoyo de mi profesión". A su vez quiso agradecérselo a todos sus amigos y compañeros de Biutiful, entre ellos a "uno de los mejores directores del mundo Alejandro González Iñarritu". El agradecimiento a su esposa, Penélope Cruz, se hizo esperar, pero llegó: "Y por supuesto a mi mujer y a mi hijo por despertarme todos los días el corazón y la sonrisa". 

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Lo único que le ha podido faltar a Bardem esta noche ha sido la compañía de su mujer, Penélope Cruz, con quien el pasado año protagonizaron el momento más relevante de la velada al hacer oficial su historia de amor en la gala de los Goya. Aunque no desfilaron juntos por la alfombra, la pareja de cine, que ha logrado hacer historia más allá de nuestras fronteras con sendos Oscar, se sentaron juntos en la primera fila del Palacio de Congresos de Madrid y nos obsequiaron con una noche mágica. La actriz no ganó el Goya por Los Abrazos Rotos, premio que se lo llevó Lola Dueñas por Yo también, pero su aparición junto a Javier Bardem dio la vuelta al mundo. Recordemos que Penélope, aspirante a un Oscar el pasado año por Nine, prefirió acudir a esta gala que asistir al célebre almuerzo de los nominados en Beverly Hills. El hacer oficial su relación con Javier Bardem y la sorprendente aparición en los Goya de su gran amigo, Pedro Almodóvar, pudo infinitamente más que codearse con los aspirantes a la preciada estatuilla.

"Este Goya se queda en España", ha manifestado Javier al posar con el Goya en uno de los días más inolvidables de su carrera. Gracias a su interpretación en Biutiful, una de las más difíciles de su carrera, pudo ganar en una misma noche el Goya y el BAFTA a Mejor Actor. Sin embargo, y aunque en el 2008 ya consiguió el premio de la Academia del Cine británico por No es país para viejos, Javier Bardem no ha podido vencer este año a Colin Firth, que se llevó el Bafta por su excepcional interpretación en El discurso del rey.